¿Cómo se puede coleccionar una forma de arte inmaterial como el Net.Art? La pregunta es aún más relevante en la medida en que muchos net-artistas de la primera generación (a la que pertenece Daniel G. Andújar) se oponían tanto al marco institucional de los museos como al marco comercial del sistema de galerías. Inspirados por el movimiento de las primeras vanguardias, esta generación de net–artistas quería crear arte para un Internet como nuevo espacio público. Prolongando la “desmaterialización del objeto artístico”, frase acuñada por Lucy Lippard y John Chandler para describir el arte conceptual de las décadas de 1960 y 1970, las obras de los net-artistas no se manifestaban en el mundo físico sino que existían únicamente en la red de datos digitales bajo la forma de páginas web, navegadores y archivos web. La Net.Art Classics Collection de TTTP (formada por las páginas principales de las webs de net-artistas influyentes ―entre ellas la de TTTP― impresas en lienzo y enmarcadas en molduras de esmalte) demuestra que pensar que el Net.Art puede convertirse en una serie de artículos coleccionables es un error. Al mismo tiempo, la colección rinde homenaje a estas obras y al uso que hacían de Internet como material y medio, y reconoce que su importancia desde el punto de vista de la historia del arte puede compararse a la de la pintura clásica.